La televisión y los comerciales

Estarán de acuerdo conmigo que quien quiere ver algún programa en televisión estará obligado a ver más tiempo de comerciales. Les comento que a mí me gustan los programas de investigación policiaca o las películas de este mismo tema, sin embargo, prefiero no verlos porque son muchos los cortes comerciales que se realizan y cada uno tiene una duración de 5 minutos.

Es cierto que saber la duración permite alejarse y no ver tal variedad de anuncios que tienen la intención de hacerte comprar todo tipo de productos. Aclaro que en mi caso esta intención no obtiene resultados (ni los obtendrá) porque yo me cierro a todo tipo de persuasión que se quiera crear con este tipo de publicidad. Aclaro que tuve que ver todos los comerciales para un ejercicio didáctico, pero no es mi costumbre hacerlo. De cualquier modo, es un hecho que los programas de las dos televisoras más importantes de la televisión se ven saturados de comerciales que llevan a cualquiera a la desesperación. Por eso, es mejor no verla o elegir los canales culturales como el 11 o el 22 en los que podemos encontrar algo más que enajenación comercial.

Citando a Jorge Volpi

Retomo este blog después de una larga ausencia y quiero compartir con ustedes el siguiente pensamiento de Jorge Volpi sobre la importancia de leer:

No quiero exagerar: leer cuentos y novelas no nos hace por fuerza mejores personas, pero estoy convencido de que quien no lee cuentos y novelas –y quien no persigue las distintas variedades de la ficción- tiene menos posibilidades de comprender el mundo, de comprender a los demás y de comprenderse a sí mismo. Leer ficciones complejas, habitadas por personajes profundos y contradictorios, como tú y como yo, como cada uno de nosotros, impregnadas de emoción y desconcierto, imprevisibles y desafiantes, se convierte en una de las mejores formas de aprender a ser humano.

Les recomiendo leer todo el libro: Jorge Volpi. ( 2011) Leer la mente. El cerebro y el arte de la ficción. México: Alfaguara, pág. 30